El Real Madrid sigue sin reencontrarse con su mejor versión en esta temporada. La ausencia de Toni Kroos en el mediocampo, obligó a la "Casa Blanca" cambiar su estilo de juego, pero hasta ahora, Carlo Ancelotti no da con la tecla para retomar el rumbo de la campaña pasada.
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El cuerpo técnico ha probado con jugadores como Jude Bellingham, Aurélien Tchouaméni, Eduardo Camavinga, Luka Modrić y Fede Valverde para realizar la tarea de organizador del ex centrocampista alemán. Sin embargo, ninguno ha podido asumir la responsabilidad y su rendimiento bajó considerablemente.
Uno de los más señalados es el "Pajarito" Valverde, ya que su nivel en este inicio de temporada ha dejado mucho que desear. Toni Kroos antes de retirarse le dejo el número "8" y los aficionados esperaban que Fede pudiera tomar el mando del mediocampo.
Su labor en el campo es mucho más defensiva
La polivalencia es una de las principales virtudes de Fede Valverde. Durante toda su carrera, ha tenido que jugar como pivote, lateral derecho, volante, carrilero y extremo derecho, todo dependiendo de las necesidades de su equipo.
Sin embargo, en el presente curso ha recibido muchas críticas (todo el equipo) por su actual rendimiento. En los primeros compromisos, el uruguayo dejó destellos de su gran habilidad para atacar y aportar en los goles del Real Madrid (tanto goles como asistencias), siendo uno de los mejores de la "Casa Blanca".
Desafortunadamente, la lesión de Dani Carvajal cambiaron los planes y ahora Valverde tiene muchas más responsabilidades defensivas. El ex jugador de Peñarol, debe encargarse de la salida de balón y de apoyar a Lucas Vázquez en defensa, terminando todos los partidos desgatado físicamente.
Fede Valverde: el todoterreno del Real Madrid
Su posición favorita en el campo es como interior, logrando apoyar en defensa y también en el ataque con disparos lejanos o transiciones rápidas. Pero ahora, sin Toni Kroos, debe estar en otras funciones como la creación de juego.
Una labor a la que no está acostumbrado y que lo desgasta; por ello, Carlo Ancelotti necesita reubicar a uno de sus mejores centrocampistas y darle esa responsabilidad a otros jugadores como Camavinga o Tchouaméni; los cuales están más acostumbrados a iniciar las jugadas desde atrás.
