El Cruzeiro de Belo Horizonte ha anunciado la llegada de Leonardo Jardim como su nuevo entrenador, reemplazando a Fernando Diniz, quien fue destituido la semana pasada tras un inicio complicado en el Campeonato Mineiro. Con un contrato que se extiende hasta finales de 2026, Jardim se enfrenta a un reto significativo, siendo esta su primera experiencia en un club sudamericano.
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Jardim, recordado en Mónaco
Jardim, de 50 años, anteriormente dirigió al Al-Ain y cuenta con una trayectoria destacada en Europa, donde se ganó el respeto mundial en su paso por el Mónaco. Durante su etapa en el club francés, logró conquistar la Ligue 1 y alcanzar las semifinales de la Champions League en 2017**, destacándose por su capacidad para desarrollar a jugadores de renombre como Kylian Mbappé y Radamel Falcao.
Nacido en Venezuela de padres portugueses, Jardim realizó sus estudios en la Universidad de Madeira y se convirtió en uno de los entrenadores más jóvenes en obtener una licencia de la UEFA. Su experiencia incluye diversas etapas en equipos árabes, donde ha demostrado su habilidad para obtener títulos importantes, incluyendo la Champions de Asia.
Cruzeiro y su ambicioso proyecto
La decisión de traer a Jardim al Cruzeiro es parte de un megaproyecto ambicioso del club, que ha realizado importantes fichajes en las últimas temporadas, como Gabigol y Dudu, y busca revertir una racha negativa después de un decepcionante inicio de año, que incluyó dos decepcionantes resultados en el Campeonato Mineiro.
Los aficionados tienen altas expectativas para esta nueva era. El club brasileño, que experimentó cambios importantes tras la salida de Ronaldo y la llegada de nuevos propietarios, busca enfocarse en el éxito inminente tras un periodo de inestabilidad. La presión está sobre Jardim, quien deberá utilizar su vasta experiencia internacional para guiar al Cruzeiro hacia el éxito.
Con el Brasileirao comenzando a finales de marzo, la llegada de Jardim podría ser el impulso que el Cruzeiro necesita para recobrar la competitividad y cumplir los sueños de su afición. La historia está lista para escribirse, y el club será un escenario clave para que Jardim muestre su capacidad en esta nueva etapa en Brasil.