El encuentro entre el Real Madrid y el Celta de Vigo en los octavos de final de la Copa del Rey fue un auténtico torbellino de emociones para los aficionados madridistas. Un partido que tuvo de todo: goles, remontadas, polémica y una prórroga emocionante que finalmente se decantó del lado blanco.
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El partido comenzó de manera ideal para el Real Madrid de Carlo Ancelotti. Los merengues dominaron los primeros compases del encuentro y logró ponerse en ventaja con dos goles que parecían encarrilar la eliminatoria.
Kylian Mbappé y Vinícius Jr., dos de las grandes figuras del equipo, fueron los encargados de perforar la portería rival, desatando la euforia en el Estadio Santiago Bernabéu.
Sin embargo, el fútbol es impredecible, y el Celta de Vigo demostró que no iba a rendirse fácilmente. En los últimos minutos del tiempo reglamentario, protagonizaron una heroica remontada que dejó helados a los aficionados locales.
Jonathan Bamba y Marcos Alonso fueron los autores de los goles que igualaron el marcador 2-2, forzando la prórroga y llevando el dramatismo al límite.
Una prórroga de golazos
La prórroga fue un auténtico espectáculo. Con el corazón en la mano, los aficionados del Real Madrid vieron cómo su equipo sacaba a relucir su garra y su espíritu competitivo en los momentos más difíciles.
Tres golazos, dos de ellos obra de Endrick y uno más de Fede Valverde, sellaron la victoria y la clasificación para los cuartos de final de la Copa del Rey. La explosión de júbilo en el Bernabéu fue ensordecedora, celebrando un triunfo agónico pero merecido.
La polémica arbitral
Más allá de la emoción y los goles, el partido también estuvo marcado por la polémica arbitral. Dos jugadas puntuales generaron un intenso debate entre aficionados y analistas:
- Roja perdonada a Endrick: Apenas ingresó al terreno de juego, Endrick cometió una dura entrada que muchos consideraron merecedora de tarjeta roja. Sin embargo, el árbitro decidió no mostrarle la cartulina, generando la indignación del banquillo y los aficionados del Celta.
- Penalti no pitado al Celta: Justo antes del primer gol del Real Madrid, se produjo una jugada dentro del área blanca que el Celta reclamó como penalti. El árbitro no señaló la pena máxima y el VAR tampoco intervino.
Con esta victoria, el Real Madrid avanza a los cuartos de final de la Copa del Rey y espera conocer a su próximo rival en el sorteo. Sin duda, este partido quedará grabado en la memoria de los aficionados como un encuentro lleno de emoción, dramatismo y polémica.