El delantero del Atlético de Madrid, Antoine Griezmann, alcanzó el pasado 13 de octubre una marca histórica con la selección de Francia al jugar su partido número 81 de manera consecutiva con el equipo nacional.
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Griezmann debutó con Francia el 5 de marzo de 2014, en un partido amistoso contra Holanda. Desde entonces, ha sido una fija en las convocatorias del combinado galo.
Desde 13 de junio de 2017, en un partido entre Francia e Inglaterra, el atacante ha jugado todos los partidos que ha disputado su selección, incluyendo amistosos, partidos clasificatorios al Mundial y Eurocopa y los partidos dentro de estos certámenes.
La racha de Griezmann es la más larga en la historia del fútbol de selecciones, superando la marca de 79 partidos consecutivos que ostentaba el portero alemán Manuel Neuer.
El delantero francés es un jugador clave para la selección de Francia. Ha sido titular en los últimos tres Mundiales y Eurocopas, y ha ganado la Eurocopa de 2016 y la Copa del Mundo de 2018.
Griezmann es un ejemplo de compromiso y dedicación. Su racha de 81 partidos consecutivos es una muestra de su amor por la selección de Francia y su deseo de ayudar a su país a ganar títulos.
Griezmann ha sido un jugador clave para la selección francesa durante este período. Ha marcado 44 goles en 124 partidos, y ha sido un líder dentro y fuera del campo. La racha de Griezmann es una inspiración para todos los jugadores jóvenes que aspiran a jugar con su país. Es un ejemplo de que, con dedicación y esfuerzo, todo es posible.