El racismo ha sido una sombra persistente en el mundo del fútbol, empañando la belleza del juego y causando un profundo dolor a quienes lo sufren. Consciente de esta problemática, la FIFA ha dado un paso crucial al implementar un nuevo protocolo diseñado para erradicar el racismo de los campos de juego.
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Un Gesto, Un Cambio
El corazón de este protocolo reside en un gesto simple pero poderoso: cruzar los brazos a la altura del pecho, formando una X. Este gesto universal servirá como una señal clara para los árbitros y los demás jugadores de que se está produciendo un acto racista. Al realizar esta acción, los futbolistas estarán tomando una postura firme contra la discriminación y exigiendo que se tomen medidas inmediatas.
Absolutamente todos los torneos de FIFA implementarán el nuevo gesto contra el racismo desde ahora, de hecho, se usará desde el Mundial Sub 20 Femenil que inicia este próximo sábado 31 de agosto.
Un Protocolo de Tres Niveles
Una vez que un jugador realiza el gesto, se activará un protocolo de tres niveles:
- Interrupción Temporal: El árbitro detendrá el partido de manera inmediata y se informará al público sobre la razón de la interrupción. Se dará un ultimátum al público para que cese el comportamiento racista.
- Suspensión Temporal: Si los incidentes racistas persisten, el árbitro suspenderá el partido y ordenará a los jugadores que se retiren a los vestuarios. Se emitirá un nuevo anuncio advirtiendo que el partido será abandonado si el comportamiento no cesa.
- Suspensión Definitiva: En el caso extremo de que el racismo continúe, el árbitro tendrá la autoridad para suspender definitivamente el partido. Esta decisión se tomará en consulta con las autoridades competentes y solo se llevará a cabo si se considera que es la única opción para garantizar la seguridad de todos los involucrados.
Más Allá del Campo de Juego
La FIFA va más allá de la implementación de este protocolo. La organización se ha comprometido a trabajar en colaboración con los gobiernos y las autoridades policiales para garantizar que los autores de actos racistas enfrenten las consecuencias legales correspondientes. Además, se llevarán a cabo programas educativos dirigidos a jugadores, entrenadores, aficionados y comunidades en general para promover la igualdad y el respeto.
Un Futuro Más Justo
La lucha contra el racismo es un desafío que requiere la colaboración de todos los actores involucrados en el mundo del fútbol. Con la implementación de este nuevo protocolo, la FIFA ha dado un paso significativo hacia la creación de un deporte más justo y equitativo. Sin embargo, es importante reconocer que este es solo el comienzo. Aún queda mucho trabajo por hacer para erradicar por completo el racismo de los estadios y de la sociedad en general.