Arabia Saudí había entrado a toda velocidad como uno de los países favoritos para ser el anfitrión del Mundial de 2030; sin embargo, este miércoles se anunció de manera oficial que España, Marruecos y Portugal serán los países sedes de la Copa del Mundo de 2030, mientras que Argentina, Uruguay y Paraguay albergarán los partidos inaugurales del Mundial como homenaje a los 100 años del campeonato más importante a nivel de selecciones en el deporte rey.
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Mohamed bin Salman, príncipe heredero y gobernante de facto del país asiático, confirmó minutos después de conocerse las sedes para el Mundial 2030, su postulación para albergar el Mundial de 2034, así lo dio a conocer una agencia de noticias saudí.
“Su Alteza Mohamed bin Salman anuncia el deseo del Reino de albergar la Copa del Mundo de 2034. Es un reflejo del renacimiento integral que ha logrado en todos los niveles, que ha convertido a Arabia Saudí en un centro de liderazgo y una interfaz internacional para albergar la mayor e importante competición mundial. Además, de eventos en diversos campos, con las capacidades que posee, componentes económicos y un gran patrimonio cultural.
La intención de ser anfitrión surge como una afirmación de los claros y grandes esfuerzos realizados por el Reino para difundir mensajes de paz y amor en el mundo. Del cual el deporte es uno de los aspectos más importantes y destacados, ya que es un medio importante para el encuentro de personas de diferentes etnias y multiculturalismo, que es lo que el Reino se ha esforzado por lograr en diversos campos, incluido el deportivo”.
De esta manera, un posible Mundial en territorio saudí en 2034 colocaría a la FIFA contra las cuerdas nuevamente. El máximo ente regulador del fútbol mundial tendría que reagendar todo el calendario para organizar el certamen a mitad de temporada como ocurrió con Catar 2022, puesto que las altas temperaturas prohíben organizar un Mundial en Arabia Saudí en junio-julio.