El actual conflicto en Oriente Medio, que involucra a Israel, Líbano e Irán, ha comenzado a tener repercusiones en el ámbito deportivo, particularmente en la Liga de Campeones de Asia.
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Buscan reubicación del partido del 22 de octubre
En este contexto, el club Al Nassr de Arabia Saudí, que cuenta en sus filas con la estrella portuguesa Cristiano Ronaldo, está considerando solicitar a la Confederación Asiática de Fútbol la reubicación de su partido programado para el 22 de octubre en Teherán, donde se enfrentarán al Esteghlal, a un lugar neutral.
Un portavoz del Al Nassr, en declaraciones a Al Riyadiya, comentó: “Estamos monitoreando la situación y en los próximos días buscaremos trasladar el encuentro a un terreno neutral”. Sin embargo, se aclaró que aún no se ha formalizado la petición a la Confederación Asiática: “Todavía no hemos presentado una solicitud oficial para mover este esperado encuentro continental”.
Es importante recordar que en 2016, la Confederación Asiática tomó la decisión de que los partidos entre los clubes de Arabia Saudí e Irán se jugaran en sedes neutrales, una normativa que estuvo en vigor hasta la última edición de la competición, cuando se permitió nuevamente a los equipos saudíes e iraníes jugar en sus respectivos estadios.
Durante ese período, los clubes saudíes optaron por Qatar como sede para sus partidos, mientras que los equipos iraníes eligieron Mascate, la capital de Omán, y Dubái en los Emiratos Árabes Unidos. En la actual edición de la Liga de Campeones de Asia, el Al Nassr inició su camino con un empate 1-1 en su visita al Al Shorta de Irak, partido en el que Cristiano Ronaldo no estuvo presente.
En su segundo encuentro, el delantero portugués anotó el gol que otorgó la victoria al equipo frente al Al Rayyan de Qatar, con un marcador final de 2-1. Actualmente, el Al Nassr se posiciona en el cuarto lugar de la zona oeste con cuatro puntos, lo que lo sitúa a dos puntos de distancia de Al Hilal y Al Ahli, y un punto por encima del Esteghlal, su próximo oponente.
La situación actual plantea desafíos no solo en el ámbito político, sino también en el deportivo, donde el Al Nassr y otros clubes de la región deberán navegar cuidadosamente para garantizar la continuidad de sus competiciones en un entorno cada vez más incierto.
Situación crítica
La posible reubicación del partido a un terreno neutral podría ser una solución viable para asegurar que el fútbol siga adelante, a pesar de las tensiones geopolíticas que afectan a la región. El futuro de la Liga de Campeones de Asia se encuentra en un momento crítico, y la respuesta de las autoridades futbolísticas será fundamental para determinar el desenlace de esta situación.