El FC Barcelona recibió la visita del RCD Espanyol en el Spotify Camp Nou, en un duelo con varias polémicas y un expulsado por cada equipo, para repartir puntos con el marcador final de 1-1 en la Liga Santander.
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Los dirigidos por Xavi Hernández, salieron al terreno de juego con el objetivo de lograr los tres puntos y mantener su ventaja sobre el Real Madrid por el liderato liguero, pero con este empate, queda con la misma cantidad de puntos que el conjunto blanco.
Por si parte, los dirigidos por Diego Martínez Penas se llevan un resultado positivo, tomando en cuenta el rival y su preocupante posición entre los penúltimos lugares de la tabla de posiciones.
El compromiso lo comenzó con un gol en los primeros minutos por intermedio del lateral Marcos Alonso al minuto 7, para manejar con mucha más tranquilidad el partido y la posesión de balón, buscando abrir los espacios para poder atacar. El compromiso no se movió y se fueron al descanso.
En la segunda mitad, el partido siguió su rumbo y en los minutos finales comenzaron las polémicas por las faltas pitadas del árbitro Antonio Mateu Lahoz, quién marcó penal para los visitantes por un pisotón dentro del área. De esta forma, llegó la igualdad en el marcador con el gol de Joselú al 73.
En los últimos minutos, fue expulsado Jordi Alba por protestar la jugada del penalti y la infracción previa, dejando a su equipo con 10, seguidamente en una jugada disputada con el delantero Robert Robert Lewandowski, el centrocampista Vinícius Souza fue el otro expulsado para quedar ambos equipos con 10 jugadores, luego de esta polémica se daba el final del partido 1.-1
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