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El Real Madrid atraviesa un momento de transición luego de una temporada sin títulos, lo que marca el inicio de un proceso de cambio en el club. Tras una etapa bajo la dirección de Carlo Ancelotti, el entrenador italiano dejará el cargo y, todo apunta a que será Xabi Alonso, exjugador de la "Casa Blanca", quien tome las riendas del equipo. Esta decisión, que apunta a renovar el proyecto deportivo del club, abre varias incógnitas, especialmente en el mediocampo.
Uno de los mayores interrogantes que surge con la llegada de Xabi Alonso al banquillo es el futuro de Luka Modric. A pesar de tener 39 años, Modric sigue siendo considerado el mejor jugador en la medular del Real Madrid. Su calidad, visión de juego y liderazgo siguen siendo indiscutibles, pero la nueva dirección deportiva parece estar inclinada hacia un cambio generacional en la plantilla.
La incorporación de un centrocampista creativo está en los planes del club, ya que es una de las principales carencias que el equipo ha mostrado durante la última temporada. Sin embargo, la idea es que esta nueva llegada no solo aporte frescura, sino que, posiblemente, signifique la salida de Modric, quien se ve con la necesidad de negociar su permanencia.
El croata, por su parte, se resiste a abandonar el club y busca la intervención de Xabi Alonso para que su futuro en el Real Madrid siga ligado al equipo. La situación de Modric está en una cuerda floja, ya que la política deportiva del club apunta a hacer una renovación progresiva de la oncena.
En cuanto al mercado de fichajes, el Real Madrid tiene claro su objetivo de reforzar varias posiciones. Según ha informado el medio AS, la hoja de ruta incluye la incorporación de un central (con el joven Huijsen como favorito), un lateral izquierdo (Álvaro Carreras parece el elegido) y un mediocampista, con el nombre de Martin Zubimendi sonando fuerte. A esto se añade la ya concretada llegada de Alexander-Arnold, quien reforzará el lateral derecho.
El centro del campo es, sin duda, una de las áreas más afectadas, pues el Real Madrid ha contado con solo seis centrocampistas puros (Tchouaméni, Valverde, Camavinga, Ceballos, Bellingham y Modric) a lo largo de la temporada. Además, las lesiones han mermado mucho al equipo, con Camavinga perdiendo 33 partidos, Ceballos 15 y Tchouaméni 5. De los seis mediocampistas disponibles, el único que ha logrado mantenerse a flote sin problemas físicos ha sido Modric. Esta situación demuestra la fragilidad de la zona intermedia y la necesidad urgente de reforzarla.