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La temporada 2024-2025 será recordada como una de las más exitosas en la historia reciente del FC Barcelona. Tras varios años de incertidumbre, la llegada del técnico alemán Hansi Flick marcó un punto de inflexión en el rendimiento del equipo, transformando un conjunto irregular en una máquina ganadora.
Con una idea clara de juego, disciplina táctica y confianza renovada, el club catalán logró conquistar los tres títulos nacionales más importantes: la Supercopa de España, la Copa del Rey y LaLiga.
Uno de los protagonistas indiscutibles de este resurgir fue el extremo brasileño Raphinha. Con un despliegue ofensivo excepcional, el jugador nacido en Porto Alegre se convirtió en una de las armas más letales del ataque blaugrana.
Durante el certamen liguero, Raphinha disputó 35 encuentros, en los cuales anotó 18 goles y brindó 11 asistencias, participando directamente en 29 anotaciones que resultaron siendo claves para el título. Su capacidad para desequilibrar en el uno contra uno, su velocidad y su visión de juego lo colocaron entre los mejores jugadores de la temporada.
Tras confirmarse el campeonato en LaLiga, el brasileño cumplió con una promesa que había hecho en el transcurso de la campaña: cruzar el Estadio Olímpico de Montjuic de rodillas si el equipo salía campeón.
Sin importar el dolor ni las consecuencias físicas, Raphinha recorrió todo el campo en señal de agradecimiento y compromiso, generando una escena emotiva que será difícil de olvidar. Las cámaras captaron el estado de sus rodillas, visiblemente afectadas por el esfuerzo, lo que no hizo más que resaltar su entrega y pasión por el club.
Este FC Barcelona ha renacido. Más allá de los títulos, ha recuperado una identidad, una unión dentro del vestuario y una conexión con la afición que parecía haberse perdido. La era Flick apenas comienza, y los cimientos de este éxito ya están firmemente colocados.
