El FC Barcelona aún no sabe con certeza cuál será la fecha exacta de su regreso al Camp Nou, ya que las obras de renovación del estadio continúan. Aunque originalmente se había fijado una fecha para finales de noviembre de 2024, la fecha de regreso ya se ha pospuesto en tres ocasiones. Esto podría afectar al último Clásico de la temporada, a menos que se enfrenten en las últimas etapas de la competición europea.
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El Ayuntamiento de Barcelona ha ampliado su licencia para el Estadi Olimpic Lluis Companys hasta finales de abril para permanecer en Montjuic, pero no pueden prolongar más su estancia en la montaña mágica, ya que tienen previstos una serie de conciertos para mayo.
El próximo partido, previsto para el fin de semana del 11 de mayo, es el Clásico. El Real Madrid visitará en teoría el Camp Nou con 60.000 aficionados que volverán a su casa para el partido más importante del mundo. Sin embargo, dada la incertidumbre sobre la situación, el Diario AS afirma que el Barcelona está considerando organizar el partido en el extranjero.
La información, originalmente de Catalunya Radio, dice que los blaugranas están evaluando la posibilidad de jugar el partido en otro gran estadio europeo si el Spotify Camp Nou no está listo. El partido suele suponer unos ingresos de entre 8 y 9 millones de euros por día, de ahí su deseo de jugarlo lejos de Montjuic y su menor capacidad.
LaLiga y la RFEF deben dar el visto bueno
Este no es un plan que se haya comunicado aún a LaLiga ni a la RFEF, ambas tendrían que aprobarlo. Cabe señalar que LaLiga ha propuesto en múltiples ocasiones albergar partidos en los EE. UU., y el plan más reciente de jugar el FC Barcelona contra el Atlético de Madrid en Miami el pasado mes de diciembre fue descartado.
Estos planes han contado con la aprobación del FC Barcelona, lo que sugiere que La Liga podría estar abierta a la idea. Los planes fueron desechados por la RFEF, ya que no tenían un presidente permanente en ese momento, y había dudas sobre la legalidad de que fuera aprobado por un comité interino. El recientemente nombrado Rafael Louzan parece tener una buena relación con el presidente de La Liga, Javier Tebas, ya que este último fue nombrado miembro de la junta directiva de la RFEF por Louzan.