El entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti, se mostró tranquilo y sereno tras el empate de su equipo contra el Rayo Vallecano, a pesar de que el resultado negó al connjunto merengue la oportunidad de reclamar el primer puesto provisional en LaLiga.
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El estratega italiano se mantuvo concentrado en el panorama general, abordando el desempeño del equipo y las contribuciones individuales en lugar de insistir demasiado en la oportunidad perdida.
Vinicius y el incidente del penalti
Uno de los principales temas de conversación del partido fue una controvertida decisión de penalti que involucraba a Vinicius Jr. Ancelotti expresó su decepción con la decisión, ya que creía que el penalti era innegable.
“El penalti me parece muy claro. No jugó porque jugó los 90 minutos después de su lesión. Tuvo dos oportunidades y creo que hizo un buen partido”, comenzó diciendo.
Sin embargo, Vinicius no estuvo en el once inicial, probablemente debido a su reciente regreso de una lesión.
Pese a salir desde el banquillo, el extremo brasileño consiguió crear un par de buenas oportunidades, demostrando su determinación y talento sobre el terreno de juego.
En cuanto a la tendencia de Vinicius a enfrentarse a árbitros y rivales, Ancelotti evitó ahondar demasiado en el tema: "No quiero tocarlo", dijo.
La actuación de Rodrygo
Ancelotti también opinó sobre la actuación de Rodrygo. El delantero pareció haber recuperado su forma, demostrando su habilidad y compromiso durante el partido.
Ancelotti se mostró optimista sobre el futuro de Rodrygo y destacó la importancia de la próxima oportunidad de ganar un título a mitad de semana, a la que se refirió como la manera perfecta de cerrar un año ya exitoso.
“Solo nos faltaba un gol. Rodrygo ha vuelto a estar en su mejor forma. Veo un futuro brillante por delante. Hay una gran posibilidad de ganar un título el miércoles y sería la guinda de un año espectacular”, concluyó el estratega italiano del Real Madrid.