El 27 de agosto de 2012, un día que muchos madridistas recuerdan con cariño, Luka Modrić cumplía un sueño al firmar con el Real Madrid. Pocos imaginaban entonces que aquel mediocampista croata, que llegaba al club con casi 27 años, se convertiría en una de las mayores leyendas en la historia del conjunto blanco.
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Modrić, que arribó procedente del Tottenham , por petición del entonces entrenador, José Mourinho en una transacción que estuvo cerca de los 35 millones de euros, marcó un antes y un después en el centro del campo del Real Madrid.
Desde la temporada 2012-2013, Modrić ha sido una pieza fundamental para el conjunto blanco en todos los títulos conquistados. El mago croata vistió la camiseta del Real Madrid por 13 temporadas, donde defendió con mucho orgullo el escudo de Valdebebas.