Eduardo Camavinga ha tenido una temporada complicada, marcada por dos lesiones que lo han mantenido alejado del campo durante 17 partidos. Sin embargo, su versatilidad ha emergido como un factor clave para Carlo Ancelotti al momento de armar el once titular del Real Madrid. A pesar de las dificultades, el joven francés se ha adaptado a diferentes posiciones, convirtiéndose en un recurso valioso para el técnico italiano.
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Comodín para Ancelotti
Desde su regreso tras la última lesión, Camavinga ha sido alineado como lateral izquierdo en dos de los tres partidos disputados. Esta no es una posición desconocida para él, ya que ha jugado en esa demarcación anteriormente.
Ancelotti ha encontrado en su buen manejo del balón y su capacidad de verticalidad una opción atractiva, especialmente en encuentros donde el Madrid tiene el control del juego. Un claro ejemplo de esto fue la segunda mitad del partido contra el Valencia, donde el equipo necesitaba un jugador que pudiera generar juego y mantener la posesión del balón.
A pesar de que la opción de Camavinga como lateral izquierdo no es del todo del agrado en los despachos de Valdebebas, su uso ha sido necesario debido a las lesiones recurrentes de Ferland Mendy y la poca confianza que se tiene en Fran García.
Sin embargo, con ambos jugadores en condiciones óptimas, las últimas alineaciones sugieren un posible cambio de tendencia en la estrategia de Ancelotti. Camavinga ha disputado un total de 25 partidos como lateral izquierdo en el Madrid, 17 de ellos en la temporada 2022-2023, lo que demuestra su capacidad de adaptación.
Mendy y García pierden su lugar
La insatisfacción de Ancelotti con el rendimiento de Mendy y Fran García, los dos especialistas en la posición de lateral izquierdo, ha llevado al técnico a considerar a Camavinga como una alternativa viable. Mendy aporta seguridad defensiva, pero carece de la creatividad necesaria para contribuir en ataque, mientras que García ofrece más en términos ofensivos, pero es menos sólido defensivamente. Camavinga, por su parte, ofrece un equilibrio entre ambas fases del juego, aunque su posición preferida sigue siendo la de mediocentro.
A pesar de que Aurélien Tchouaméni ha sido utilizado como central debido a las lesiones en la defensa, Ancelotti ha mantenido su estrategia sin alterar la posición de Camavinga. Con la llegada de Dani Ceballos al centro del campo, junto a Fede Valverde y Jude Bellingham, el técnico ha encontrado la pieza que le faltaba para fortalecer su equipo. Así, Eduardo Camavinga se ha consolidado como un comodín indispensable en el esquema de Ancelotti, listo para responder a las necesidades tácticas del Real Madrid en esta temporada.