El ambiente en el Santiago Bernabéu está siendo desolador este miércoles, cuando apenas una hora y media antes del inicio del partido entre el Real Madrid y el Mallorca, las gradas permanecen prácticamente vacías. Una imagen que refleja la decepción de la afición tras una temporada marcada por la eliminación en la Copa del Rey, la Champions League y la pérdida de opciones en LaLiga.
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La ausencia de público en el estadio es un síntoma del profundo malestar que vive el madridismo. Las expectativas eran altas con la llegada de figuras como Kylian Mbappé, pero las lesiones y la falta de cohesión en el equipo han impedido alcanzar los objetivos. La derrota en los cuatro Clásicos ante el Barcelona, que dejó al equipo sin posibilidades reales de pelear por el título de liga y de copa, fue especialmente dolorosa.
Además de LaLiga, la eliminación en la Copa del Rey y en la Champions League ha dejado al equipo sin opciones de levantar trofeos importantes esta temporada. El desgaste físico y las constantes lesiones han mermado el rendimiento del equipo. Incluso, las decisiones tácticas de Carlo Ancelotti han sido objeto de críticas a lo largo de la campaña.
La imagen del Bernabéu vacío antes del partido denota de la frustración de unos hinchas que esperaban mucho más. Con la temporada prácticamente perdida, la llegada de Xabi Alonso al banquillo es inminente y es algo que ilusiona al madridismo.