El Barcelona ha vivido una transformación significativa en los últimos años, y en el centro de esa evolución están dos entrenadores: Xavi Hernández y Hansi Flick. Aunque ambos han trabajado con una base prácticamente idéntica de jugadores, sus estilos de juego, enfoques tácticos y niveles de éxito difieren notablemente.
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La misma base de jugadores, diferentes estilos de juego
Desde su incorporación en noviembre de 2021, Xavi mantuvo la identidad clásica del Barça: un fútbol de posesión, construcción desde atrás y ataque elaborado.
Durante su mandato, el equipo alcanzó los cuartos de final de la Champions League y dominó en algunos partidos importantes, pero en la última temporada sufrió una eliminación temprana y una crisis que afectó la moral del club.
Por su parte, Hansi Flick asumió en medio de esa crisis y rápidamente introdujo cambios en el estilo de juego.
Su estrategia fue enfatizar la verticalidad, la presión alta y el juego directo, logrando transformar la mentalidad del equipo y obtener resultados sorprendentes. Ambos técnicos utilizaron prácticamente la misma plantilla, pero el enfoque táctico de Flick resultó ser más efectivo en las actuales circunstancias del fútbol europeo.
Diferencias clave en el estilo y en los resultados
Mayor agresividad y presión alta
Bajo la dirección de Xavi, el Barça mantuvo un promedio de posesión del 64% en toda la temporada, enfocándose en mantener el balón y crear oportunidades con calma.
En cambio, Flick ha logrado que el equipo sea más vertical y presione más arriba en el campo, con una posesión del 67.65%. Esta mayor intensidad ha permitido a los catalanes ser más efectivos en la zona final y dominar la capacidad ofensiva.
Resultados deportivos y títulos
La diferencia crucial radica en los resultados: con Flick en el banquillo, el Barcelona llegó a semifinales de Champions, tras un contundente 4-0 en la ida contra el Inter de Milán, y actualmente lidera La Liga con cuatro puntos de ventaja sobre Real Madrid. Además, conquistaron la Supercopa de España y la Copa del Rey tras vencer 5-2 y 3-2 respectivamente al clásico rival, Real Madrid. La temporada de Flick ha sido de éxito rotundo hasta ahora, con una racha invicta de 24 partidos.
Por otro lado, la última temporada de Xavi fue problemática: eliminación en Champions, derrota en el Clásico y una crisis económica y de imagen. La falta de títulos y la caída en los resultados marcaron un fin de ciclo difícil en el club.
La evolución de la plantilla y los cambios tácticos
Uno de los aspectos más destacados de la era Flick es su capacidad para maximizar el talento individual y colectivo. La adaptación física, el trabajo en la presión y la disciplina férrea han sido clave. Además, ha potenciar el rendimiento de jugadores como Lewandowski, Raphinha y Lamine Yamal, que suman más de 130 contribuciones de gol en la temporada.
Mientras tanto, Xavi apuesta por el estilo clásico del Barcelona, con un fútbol atractivo pero que no ha logrado traducirse en títulos en la última campaña. La diferencia en resultados refleja cómo una misma base puede adaptarse a estilos diferentes y obtener resultados dispares.
¿Cuál ha sido más exitoso?
El balance es claro: Hansi Flick ha logrado convertir al Barcelona en un equipo más competitivo, sólido en todas las competiciones y con una mentalidad ganadora. La victoria en la Supercopa y la Copa del Rey, el liderazgo en La Liga y la clasificación a semifinales de Champions dejan en evidencia su impacto.
Por otro lado, el proyecto de Xavi, aunque más centrado en el estilo y la filosofía, lesionó en el rendimiento y en los resultados recientes. La diferencia radica en cómo cada entrenador ha sabido maximizar el potencial del mismo plantel.
El Barcelona de Xavi y el de Flick demuestran que, aunque comparten la misma base de jugadores, los estilos de juego y las estrategias son determinantes para el éxito. Flick ha llevado al equipo a un nivel superior gracias a un fútbol más vertical, disciplinado y efectivo, mientras que Xavi continúa apostando por el estilo clásico del club, que requiere más tiempo y estabilidad para dar frutos.
Flick ha sabido dar continuidad al proyecto iniciado por Xavi; confianza en La Masía, posesión de balón, potenciar a jugadores clave como Pedri y Lamine Yamal. Si bien los resultado pueden respaldar a Flick, no hay que hacer de menos el trabajo de Xavi, quien sentó las bases para que el Barcelona esté hoy por hoy en los planos estelares del fútbol mundial.
