El FC Barcelona ha mostrado un claro dominio en sus enfrentamientos directos contra el Atlético de Madrid en las eliminatorias de la Copa del Rey. En su último compromiso, los azulgranas lograron clasificar a la final tras ganar por la mínima en el partido de vuelta de semis, después de un emocionante 4-4 en el partido de ida celebrado en Montjuïc.
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Este triunfo significa que el Barça ha superado las últimas cuatro eliminatorias contra los colchoneros, lo que se traduce como cuatro clasificaciones consecutivas en esta competición siempre que se enfrenta ante el cuadro colchonero.
Partido de alta tensión
El choque tuvo lugar en el Estadio Metropolitano y cumplió todas las expectativas de ser un verdadero evento de vida o muerte, atrayendo a más de 69,000 espectadores. Desde el inicio del partido, el FC Barcelona mostró una actitud ofensiva y dominante, cuando un brillante Lamine Yamal dejó su huella en el juego, desestabilizando a la defensa del Atlético con su velocidad y técnica.
El único gol del compromiso llegó en el minuto 26, con Ferran Torres aprovechando un error del equipo rival para abrir el marcador, gracias a una asistencia magistral de Yamal.
El primer tiempo terminó con el Barcelona al mando, mientras el Atlético lidiaba con decisiones arbitrales polémicas que generaron tensión entre los jugadores y la afición. El árbitro, Munuera Montero, tuvo que lidiar con varios episodios controversiales, incluyendo una amonestación a Azpilicueta que pudo haber sido más drástica.
El segundo tiempo prometía más acción, y el Atlético mostró una mejoría en su juego, creando varias oportunidades para empatar. Sin embargo, el Barça se mantuvo firme, utilizando su línea defensiva y su táctica de fuera de juego para frustrar los esfuerzos colchoneros. A pesar de algunas amenazas, incluso un gol anulado para el Atlético por fuera de juego, el marcador se mantuvo intacto, lo que desató una explosión de alegría entre los jugadores y seguidores del Barça al finalizar el partido.
Clásico en la Final
La derrota dejó al Atlético de Madrid en una situación complicada, después de ser eliminado de la Champions y quedar bastante rezagado en la liga. Por su parte, el FC Barcelona avanza a su 43ª final de la Copa del Rey, donde enfrentará al eterno rival, Real Madrid, el próximo 26 de abril en Sevilla, un paso más hacia el anhelado triplete.
Ésta será la octava final de Copa Del Rey entre Real Madrid y FC Barcelona (cuatro títulos para los blancos, tres para los blaugranas), tan solo el Barcelona-Athletic ha sido la final más repetida en la competición (9) que el Clásico.