Es muy común escuchar que los tiempos complejos también tienen su cuota de positivismo si lo sabes encontrar. En el FC Barcelona pueden dar fe de esto, porque cuando todo parecía cuesta arriba para rearmar una plantilla competitiva en Europa, propia de la historia del club; soluciones llegaron desde sus mismos cimientos para mostrar esa luz al final del túnel.
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Y esto se trata de revisar cómo el Barcelona encontró en su cantera, la conocida 'Masía', varias de las piezas que preocupaban a la entidad sobre la construcción del futuro en el equipo. Los azulgranas, que aún están recuperando la economía del conjunto catalán, cosa que los ha mermado de competir en grandes desembolsos con otros pares en busca de estrellas, han sacado petróleo de una forma que nadie vio venir.
Hoy, el equipo dirigido por Xavi Hernández, ha renacido en el nivel gracias a jóvenes como, por ejemplo, Lamine Yamal (16 años), Pau Cubarsí (17 años), Fermín López (20 años), quienes han tomado un listón que en otros años, quizá, debía durar más tiempo para hacerlo. Justamente, en los dos últimos grandes cotejos del Barca son prueba de esto, porque estos muchachos guiaron a la plantilla a mejor puerto, en las victorias contra Napoli en Champions (3-1) y luego en la Liga con el Atlético de Madrid (3-0).
El once de futuro
Esta configuración hace pensar al Barcelona que tiene una hoja de ruta confiable de la que podrá apegarse en los años por venir: un once repleto de estos canteranos. Todo apunta que así será, que este cuadro azulgrana contará con la fuerza de sus formados para devolverle sitiales al club que estaban alejándose.
A futuro, con un Ter Stegen dibujando sus últimos campañas, se puede divisar una alineación con Hector Fort, Ronald Araújo, Pau Cubarsí y Alejandro Balde en defensa; con un mediocampo, fácilmente, formado por Frankie de Jong, Pedri y Gavi, junto a un Fermín haciendo las veces en el ataque al lado de Lamine Yamal y Vitor Roque, cuando Lewandowski ya no puede continuar.
Evidentemente, desde el conjunto catalán seguirán tanteando el mercado, porque su grandeza así se lo obliga, pero es mejor buscar un perfil puntual -que venga a complementar una plantilla- a tener que remplazar muchas posiciones a la vez, algo que la economía culé hoy no puede sostener.