La jornada 35 de La Liga ya dejó mucha telar que cortar, aunque Barcelona y Real Madrid siguen sin disputarla aún. Justamente, porque Girona abrió la fecha y no pudo sumar los tres puntos en su duelo contra el Alavés (2-2).
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Esta situación, sin duda alguna, genera una sonrisa en el cuadro azulgrana. Sobre todo, porque nuevamente dependen de sí mismos para quedarse con la segunda plaza de esta liga. Una que les daría acceso a pelear un título con Real Madrid en la siguiente campaña.
Ese no es otro que la Supercopa de España, a la que clasifican los dos primeros equipos de la tabla. Así como los finalistas de turno en la Copa del Rey, que este año quedó en manos del Athetic Bilbao ante Mallorca.
¿Qué necesita el Barcelona para quedar segundos?
Es sencillo y a la vez no tanto. Los culés deben ganar sus cuatro juegos pendientes en el torneo. De hacerlo, se ganarían el derecho de estar en la próxima Supercopa. Sin embargo, ese es el único escenario viable para la escuadra catalana.
Un empate en puntos con Girona no es beneficioso para los blaugranas a estas alturas del partido. Precisamente, porque no lograron ganarles en esta temporada, con un 2-4 en la ida y 4-2 en la vuelta.
Después del empate contra Alavés en el Estadio de Mendizorroza, Girona quedó con 75 unidades a su cuenta. El Barcelona, por su parte, tiene 73 puntos, pero aún no ha disputado su juego en la jornada.
Los azulgranas jugarán el venidero lunes, 13 de mayo, con la Real Sociedad de locales, en Estadio Olímpico de Montjuic. Si los de Xavi son capaces de llevarse el triunfo, pasaran nuevamente al segundo lugar de la competición.
Con todo y eso, Barcelona y Girona aún tienen rivales complicados en lo que resta de liga. Por ejemplo, los culés tienen pendiente a la propia Real y Sevilla. Por su lado, los también catalanes enfrentarán a Villarreal y Valencia.
