En Japón la industria de los concursos de belleza está color de hormiga brava, luego de que la modelo Karolina Shiino, quien fue elegida el pasado 22 de enero como Miss Japón, renunció al título, por diversas polémicas en los medios y plataformas digitales.
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La difícil situación de Shiino comenzó segundos después de haber sido coronada como la mujer más bella de japón, los ciudadanos mostraron su rechazó al ser nacida en Ucrania pero educada y criada en el país nipón. La mujer de 26 años recibió comentarios de todo tipo, entre ellos que “no representaba los ideales tradicionales de la belleza japonesa”, una situación similar a la que en el año 2015 recibió Ariana Miyamoto, al ser la primera Miss Universo Japón birracial.
Sin embargo, la situación de Karolina se tornó peor en los últimos días, cuando a través de un artículo la revista semanal japonesa Shukan Bunshun, que reveló que está teniendo una aventura con un médico creador de contenido, identificado como Tekuma Maeda, quien está casada.
Tras la publicación la joven decidió utilizar su cuenta personal de Instagram para expresar su renuncia a la corona alegando su arrepentimiento por los dolores de cabeza causados al país, y se disculpó con las personas que la apoyaron durante el certamen.
Y es que, en un principio la organización le preguntó sobre los rumores que rechazó, pero que luego admitió, alegando que estaba en total conocimiento que el hombre tiene esposa.
Igualmente, la modelo decidió renunciar a su agencia, con la cual tenía varios años trabajando en campañas.