Las primeras semanas de enero de este año fueron muy complicadas para la familia real británica, la intervención quirúrgica de la princesa de Gales, Kate Middleton, tuvo en ascuas a todo el palacio. El hermetismo que se ha manejado en cuanto a su estado de salud, ha puesto en tela de juicio la credibilidad de la monarquía, a la que acusan de esconder la verdadera situación de Kate luego de haber atravesado una operación abdominal.
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El 17 de enero, la esposa del próximo rey fue retirada del ojo público y alojada en Adelaide Cottage tras salir de The London Clinic, donde fue operada. La poca información que ha habido entorno a la princesa llevó a los seguidores a preguntarse dónde se encontraba realmente, así como a resaltar que la corona terminó de caer en debacle con el cáncer que le fue diagnosticado al rey Carlos III.
La polémica se sube al trono
Como si no fuera suficiente con todo lo que está sucediendo alrededor de la corona, un nuevo escándalo se suma a la lista y esta vez, es precisamente por la princesa. Este domingo, a través de sus redes sociales Middleton publicó una fotografía junto a sus tres hijos, como parte de la celebración del Día de la Madre en el Reino Unido, y así desaparecer los rumores sobre su estado.
Todo parecía perfecto y la imagen corrió como pólvora en internet, pero, horas más tarde importantes medios de comunicación retiraron la foto de sus portales y advirtieron a sus lectores sobre una posible manipulación en la publicación. Como algunos detalles está el final de la manga derecha de la chaqueta de Charlotte, el cual tiene un retazo junto a la muñeca que parece desplazada.
De igual forma, comentan que, la mano del pequeño Louis aparece borrosa, al igual que la cremallera de Kate no está alineada. Asimismo, resaltan la ausencia del anillo de casada aunque eso podría no tener nada que ver con la edición de la postal.
Kate se disculpa
Después de toda la revolución, la madre del segundo en la línea de sucesión tuvo que manifestarse y explicar al público que fue ella misma quien “jugando” editó la imagen. “Como muchos fotógrafos aficionados, a veces experimento con la edición. Quiero expresar mis disculpas por cualquier confusión que haya provocado la foto familiar que compartimos ayer”, escribió en X.
En reiteradas ocasiones, la princesa de Gales ha dejado clara su afición por la fotografía, por lo que es ella misma quien realiza las fotos de su familia, y funge hasta como community manager de sus propias redes sociales. De este modo, el Palacio de Kesington ha reconocido sus autorías, como la del retrato de Guillermo de Inglaterra.