El futuro estadio de los Atléticos de Oakland en Las Vegas, proyectado para ser una instalación de clase mundial, ha visto un incremento significativo en su costo. Originalmente presupuestado en $1.500 millones de dólares, el monto final ahora se estima en 1.750 millones de dólares, un aumento de $250 millones debido a ajustes en el diseño y la inclusión de nuevas comodidades.
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Razones detrás del aumento de costos
La subida se atribuye, en gran parte, a la adición de 70.000 pies cuadrados que incluirán suites premium, mejoras en los asientos y comodidades especiales para jugadores y aficionados. Estas mejoras buscan garantizar que el estadio, ubicado en el sitio del antiguo Tropicana Hotel, se convierta en uno de los más avanzados de las Grandes Ligas de Béisbol (MLB) y un atractivo visual al ofrecer vistas del famoso Strip de Las Vegas.
Adicionalmente, los costos reflejan el impacto de la inflación en los materiales de construcción y la inversión en tecnología de punta, como sistemas de enfriamiento en los asientos, diseñados para mitigar las altas temperaturas del desierto de Nevada.
Cómo se financiará el estadio
El proyecto será financiado mediante una combinación de fondos privados y públicos. El propietario de los Atléticos, John Fisher, será responsable de cubrir 1.400 millones de dólares, mientras que los 350 millones restantes provendrán de contribuciones públicas bajo la legislación aprobada por el Senado de Nevada en 2023.
A pesar del desafío económico, la organización está comprometida con su visión de un estadio de última generación, cuya construcción está programada para comenzar en la primavera de 2025 y finalizar en 2028.
El nuevo estadio no solo marcará un hito en la reubicación de los Atléticos desde Oakland, sino que también se espera que impulse el desarrollo económico y turístico de Las Vegas, consolidando a la ciudad como un importante destino deportivo en Estados Unidos.
Con estas adiciones, los Atléticos apuntan a crear una experiencia inigualable para los fanáticos, demostrando que el gasto adicional es una inversión en el futuro del béisbol y de la ciudad.