La organización de los Cardenales de Lara espera salir de este preocupante rendimiento colectivo, tras perder los tres primeros juegos de esta Gran Final, algo que le coloca a una sola victoria de Tiburones de la Guaira para obtener el título.
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Los dirigidos por Henry blanco necesitan demostrar que pueden darle la vuelta a un resultado que se ve sumamente incómodo de remontar, ya que nadie en la historia del campeonato criollo ha podido regresar de un 0-3.
Sin embargo, cuenta con un punto a su favor y es el de la velocidad en las bases, debido a que en estas instancias son el equipo que más estafadas en lo que va de la serie final, con un total de cuatro.
Por lo tanto, este es uno de los factores que necesitan aprovechar con más continuidad para el juego cuatro, el cual se estará disputando este sábado 27 de enero, en el Estadio Antonio Herrera Gutiérrez, siendo una oportunidad inmejorable para que todos los fanáticos asistan a este espectáculo.