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La final de la temporada 2024-2025 de la LVBP está más emocionante que nunca. En la noche de este jueves, el Estadio Nueva Esparta presenció el Juego 4 entre Cardenales de Lara y Bravos de Margarita, el cual finalizó con pizarra de 8 a 2 a favor de los crepusculares, quienes se apoyaron en gran medida de su abridor Anderson Espinoza.
Anderson Espinoza y un pitcheo de altura
La presencia de un lanzador del calibre del caraqueño siempre es un plus, y eso es algo que sabe muy bien el manager Henry Blanco. Si bien apenas tuvo una presentación en el Round Robin, para estas instancias finales no podía quedarse fuera de la acción. Es por ello que su misión en el Juego 4 era guiar a sus compañeros a una victoria que balanceara las cosas. Y así sucedió.
Espinoza saltó al montículo y dominó en su mayoría a la toletería insular. Luego de resolver con algunos inconvenientes la primera entrada, para el segundo sufrió la embestida local. Primero, un error en fildeo de Ildemaro Vargas permitió que Wilson Ramos inaugurara la pizarra. Minutos después, Lorenzo Cedrola remolcó la segunda al conectarle un sencillo.
Pero tras ese desliz, el derecho de 26 años sacó su mejor faceta y dominó a placer a sus rivales. Y es que del tercer inning hasta el sexto dejó fuera de circulación a los 12 bateadores que enfrentó. Al final solo toleró tres indiscutibles y dos anotaciones (una limpia), con dos bases por bolas y un ponche.
Vale agregar que el poder de Alí Sánchez, Ildemaro Vargas y Eduardo García también fueron claves para que Anderson Espinoza concretara la segunda victoria de Cardenales de Lara en esta final. Ahora, los crepusculares tratarán de cerrar por todo lo alto su visita a la isla este viernes, cuando intenten conquistar ese tercer triunfo que les permita regresar a Barquisimeto con la ventaja.