El jardinero cubano-mexicano de los Rays de Tampa Bay, Randy Arozarena, es una de las principales figuras de esta organización para una nueva temporada de la Major League Baseball. Donde tiene la responsabilidad de guiar a sus compañeros a alcanzar sus principales objetivos colectivos.
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El pelotero de 29 años sigue demostrando toda su calidad y habilidades dentro del terreno de juego, algo que no solo lo ha beneficiado desde su llegada a las Grandes Ligas en el año 2019 tanto en la parte individual como en lo colectivo.
Por lo tanto, en esta sexta campaña comenzó en óptimas condiciones estos primeros juegos y un claro ejemplo de esto, tiene que ver con una nueva historia que escribió en el juego del pasado sábado 30 de marzo, al conectar cuadrangular y robar dos bases, siendo su segundo compromiso de por vida con estos registros para quedar solo por detrás de B.J. Upton (4) y Carl Crawford (3).
Por si fuera poco, se convirtió en el séptimo jugador en la historia de la franquicia en cuanto a bases robadas con 82. Esta es una de las diversas cualidades que luce Arozarena, lo que lo acredita como uno de los mejores dentro de la Liga Americana.
Antes de la jornada de este domingo 31 de marzo, tiene un total de tres carreras anotadas, cuatro imparables, un jonrón, dos remolcadas, dos almohadillas estafadas, un boleto, cuatro ponches y un promedio ofensivo de .364 en 11 turnos al bate.