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Nueva York vive una auténtica pesadilla antes del inicio de la temporada 2025 de las Grandes Ligas. Tanto Yankees como Mets afrontan una situación crítica con múltiples bajas que ponen en jaque sus aspiraciones desde el primer día.
La enfermería está llena en ambos equipos, con al menos diez jugadores lesionados en cada novena, algunos de ellos perdiéndose toda la zafra.
Los Yankees, que tenían grandes expectativas para esta campaña, han recibido un golpe devastador con la lesión de su as, Gerrit Cole, quien no podrá ver acción hasta 2026. A él se suma el joven Chase Hampton, otra promesa del montículo que tampoco estará disponible hasta el próximo calendario.
Pero el problema no termina ahí: Giancarlo Stanton, Luis Gil, D.J. LeMahieu, Jonathan Loáisiga, Tyler Matzek, Clarke Schmidt, Jake Cousins y Scott Effross también arrastran molestias o lesiones que afectan su rendimiento y disponibilidad en el inicio de la campaña.
Por su parte, los Mets tampoco escapan del desastre. La novena de Queens tendrá que prescindir de Nick Madrigal, Christian Scott y Drew Smith por toda la temporada, mientras que otros nombres clave como Frankie Montás, Sean Manaea, Francisco Álvarez, Ronny Mauricio, A.J. Minter, Dedniel Núñez y Brandon Nimmo presentan problemas físicos que generan incertidumbre.
Las lesiones no solo afectan el rendimiento de ambos equipos, sino que obligan a los gerentes generales y dirigentes a realizar ajustes de última hora en sus estrategias. Brian Cashman y David Stearns, directivos de Yankees y Mets respectivamente, tendrán que recurrir a la profundidad de sus organizaciones para suplir estas importantes ausencias.
La temporada 2025 aún no comienza, pero la Gran Manzana ya enfrenta una crisis que podría marcar el destino de sus dos equipos más emblemáticos.