La constancia de Luis Gil en la lomita había sido puesta en duda durante el pasado mes de agosto, pero en septiembre ha podido redimirse de buena forma, sumando tres triunfos en cuatro salidas. El último de ellos, el pasado domingo en la victoria 7-4 de Yankees de Nueva York ante Atléticos de Oakland.
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Con este reciente lauro, dejó su récord en 15-6 en 28 juegos iniciados en el montículo, dejando grandes números en la que por lejos ha sido su mejor temporada en Grandes Ligas, desde que debutó en 2021.
En dicha presentación, tuvo registros de 5 hits y 4 carreras recibidas, concedió 3 bases por bolas y ponchó a 5 bateadores de los 24 que enfrentó en 5.1 innings de labor.
Una victoria importante
Si bien los 'Bombarderos del Bronx' aseguraron hace varios días su cupo en la postemporada, solo par de victorias más le asegurarían el título de división. Por este motivo, desde lo colectivo, supone un gran aporte este repunte de Gil.
Sin embargo, desde la óptica individual, este año será inolvidable para el oriundo de Azua, aún con sus altos y bajos. Desde principios de campaña, se consolidó como un as en la rotación neoyorquina, pese a no ser el rol que esperaba y mucho menos con la escasa experiencia que tenía.
Actualmente, es de hecho el segundo pitcher con más juegos ganados (15, solo superado por Rodón con 16) y mayor cantidad de ponches con 166 (detrás de los 190 de Rodón) para la causa del Bronx.
''Estoy trabajando para salir rápido del primer inning y ser lo más consistente posible'', explicó Gil tras el juego del pasado domingo.
