No cabe duda de que, a día de hoy, uno de los mejores bateadores de todas las Grandes Ligas es el venezolano Luis Arráez. Aunque no sea un jugador que sea usualmente de un OPS alto, no se puede negar que no existe un bateador que sea más consistente que el infielder de los Padres de San Diego.
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El venezolano no ha parado de batear desde que llegó a las Grandes Ligas, de hecho, en sus cinco temporadas previas en Las Mayores su promedio más bajo ha sido de .294, lo que habla de la capacidad de contacto que posee, que lo ha llevado a tener ya dos títulos de bateo en su aún naciente carrera dentro del beisbol estadounidense.
Por si fuera poco, Luis Arráez se encuentra en carrera por repetir su título de bateo en la Liga Nacional este año, y este miércoles 28 de agostio dio un gran paso en pro de ese objetivo, al lograr un juego de cuatro imparables ante San Luis. Además, el criollo se sigue acercando peligrosamente a Tony Gwynn, uno de los mejores bateadores de contacto de la historia, en lo que a juegos de cuatro o más hits se refiere.
Luis Arráez a la caza de Tony Gwynn
En el duelo entre los Padres de San Diego y los Cardenales de San Luis, el venezolano Luis Arráez logró conectar cuatro imparables en cinco turnos al bate, para así ser pieza clave dentro de un equipo que dio batalla pese a ser derrotado por pizarra de 4-3.
De esta manera, "La Regadera" llegó a 19 juegos de por vida con cuatro o más hits conectados, lo que lo deja en una muy buena posición para alcanzar la marca de otro legendario bateador de contacto de los Padres, como lo fue Tony Gwynn, quien en su carrera tuvo 45 encuentros con cuatro o más imparables.
Puede parecer que Luis Arráez todavía está bastante lejos de Gwynn, pero la realidad es que el criollo tiene 19 juegos con cuatro o más hits en un lapso de seis temporadas, el legendario Gwynn acumuló tan solo 13 juegos con dichas características durante sus primeras seis campañas en Las Mayores, por lo que en realidad el venezolano lleva un mejor ritmo.