El jardinero de los Bravos de Atlanta, Jurickson Profar, ha sido suspendido por 80 juegos tras dar positivo en una prueba de sustancias prohibidas por las Grandes Ligas (MLB). La sustancia en cuestión es la gonadotropina coriónica humana (hCG).
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La hCG es una hormona utilizada comúnmente como medicamento para la fertilidad en mujeres. Sin embargo, en el ámbito deportivo, ha sido empleada por algunos atletas como un agente enmascarante para reiniciar la producción natural de testosterona después de un ciclo de esteroides. El uso de hCG puede ayudar a mitigar los efectos secundarios asociados con la interrupción del uso de esteroides anabólicos, como la disminución en la producción de testosterona endógena.
La suspensión del patrullero curazoleño representa una pérdida significativa para los Bravos, especialmente considerando que recién se había unido al equipo con un contrato de tres años y $42 millones durante la temporada baja.
Jurickson Profar y su curioso parecido con el caso de Manny Ramírez
El caso de Profar recuerda al del exjugador Manny Ramírez, quien en 2009 fue suspendido por 50 juegos tras violar la política de drogas de la MLB. Ramírez también dio positivo por hCG y se informó que la utilizó para restablecer la producción natural de testosterona después de un ciclo de esteroides. Según reportes de ESPN, el dominicano afirmó que un médico le había recetado un medicamento sin saber que contenía una sustancia prohibida.
La MLB ha mantenido una política estricta contra el uso de sustancias para mejorar el rendimiento, incluyendo agentes enmascarantes como la hCG. Las suspensiones de jugadores como Profar y Ramírez subrayan el compromiso de la liga en mantener la integridad del deporte y garantizar una competencia justa.
