Si bien Jackson Chourio se ponchó en sus cinco primeros turnos durante el Opening Day, luego de eso no ha parado de batear y batear para la causa de los Cerveceros de Milwaukee. Y es que si nos vamos a sus números, es el líder de su equipo en carreras impulsadas, segundo en hits, y tercero en promedio.
NOTAS RELACIONADAS
Hasta la fecha suma una seguidilla de nueve encuentros con al menos un hit, de los cuales tres son multi-hits. De hecho, cabe resaltar que tras su productiva jornada dominical estableció un par de marcas personales, algo que lo siguen elevando como uno de los peloteros jóvenes más prometedores en las Grandes Ligas.
Sus estadísticas de esta campaña señalan una línea ofensiva de .295/.289/.591 en 10 compromisos, con 13 indiscutibles en 44 visitas al plato, cuatro dobles, tres cuadrangulares, nueve carreras impulsadas, seis anotadas, y .880 de OPS.
Chourio y siete jornadas productivas
La segunda semana de la actual campaña para el conjunto de Milwaukee cerró con balance positivo de 5 victorias y 2 derrotas. A lo largo de ese periodo, el bate de Jackson Chourio terminó siendo uno de los más resaltantes del equipo, una situación que sin duda los impulsó al segundo puesto de la División Central de la Liga Nacional.
Además de su aporte en el jardín derecho con jugadas espectaculares, el marabino bateó para .345 de promedio en esos siete días, con 10 inatrapables, tres dobles, tres vuelacercas, ocho carreras empujadas, cinco anotadas, .759 de slugging y 1.092 de OPS.
En su primer juego ante los Reales de Kansas City apenas pudo disparar un doble en cuatro turnos, mientras que en la jornada siguiente extendió su racha con otro sencillo. A partir del miércoles las cosas tomaron un nivel más alto, pues quedó a un triple de concretar el ciclo.
Luego, frente a los Rojos de Cincinnati, tuvo tres presentaciones bastante positivas, en especial en su faceta defensiva. Pero no fue sino hasta el domingo cuando su talento lo llevó a despachar par de cuadrangulares, además de remolcar cinco anotaciones, en lo que fue una jornada histórica en lo personal.