Para esta temporada 2024, los Mellizos de Minnesota tratarán de apoyarse nuevamente en Pablo López para inscribir su nombre en los playoffs, tal como sucedió el año pasado. Y es que para nadie es un secreto que el venezolano se perfila para lograr grandes cosas en su segunda campaña en la Liga Americana.
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Desde su llegada a Minnesota en 2023, el oriundo de Cabimas ha mejorado notablemente en su pitcheo, fortaleciendo lo que ya sabía y aprendiendo nuevos trucos para tratar de dominar a los rivales. De ahí a que las expectativas y lo ojos de muchas personas se posen sobre él desde el Opening Day.
En una entrevista para MLB, López detalló cuáles son y cómo funcionan esos pitcheos que lo convirtieron en un lanzador dominante la temporada pasada. Por algo fue el tercero mejor en el departamento de ponches, con 234, de todas las Grandes Ligas durante ese periodo.
"Mi recta de cuatro costuras es muy normal. Usualmente trato de dejarme llevar por el logo como punto de referencia. Este lanzamiento es el más fuerte y es el que lanzo con mayor potencia y convicción de todo mi repertorio", explicó en primera instancia.
Si hay algo que quiso resaltar en su crecimiento como lanzador, es que la propia organización, empezando con el coach de pitcheo, lo ayudó a ganar confianza en sí mismo. Eso, sumado a los números de la analítica, le abrieron los ojos en muchos sentidos.
"Luego tengo la recta de dos costuras. Al lanzarla las costuras surten efecto y hacen todo el trabajo. Esta en especial se la lanzo a los bateadores derechos si estoy buscando ese lanzamiento que pueda tirar adentro de las manos", detalló.
Justamente, en su intento por hacer las cosas un poco diferentes en el Spring Training, López quiso experimentar lanzando su recta de dos costuras a un bateador zurdo. El elegido en ese caso fue Matt Olson, pero el resultado fue una pelota más allá de los jardines producto de un jonrón.
"Estoy trabajando en encontrar la manera de lanzarla a un zurdo en varios puntos, quizás forzándolo, pero siempre hay un momento para intentarlo. Con (Matt) Olson fue el momento indicado para intentar, pero no resultó", expuso.
Con seis temporadas de Grandes Ligas sobre sus hombros, el zuliano ha logrado abanicar a 723 rivales en 704 innings de labor. Además, cuenta con una efectividad de 3.86 en 126 juegos, 1.18 de WHIP y los contrarios le batean para .241 de promedio.
"Por último, paso de trabajar con el dedo índice y el del corazón, a trabajar con el del corazón y el anular para mi cambio de dos costuras. El agarre lo hace todo por mí. Lo lanzo duro. Lo único que hago es intentar mantener la muñeca suelta. Siento que si lo lanzo con la muñeca tensa lo hace no tener tanto movimiento", concluyó Pablo López.