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Eugenio Suárez, el poderoso venezolano de los Cascabeles de Arizona, está escribiendo una de las páginas más emocionantes del beisbol moderno. Sus números desde julio son sencillamente asombrosos y lo colocan en una conversación exclusiva con una de las leyendas más grandes del deporte: Babe Ruth.
Cuatro juegos con cuatro hits o más, y cuatro juegos con cinco o más carreras impulsadas desde julio. Estas cifras no solo son impresionantes, sino que también son históricamente significativas.
Según Opta Stats, desde que la carrera impulsada se convirtió en una estadística oficial en 1920, solo otro jugador en las Grandes Ligas había logrado tal hazaña en julio o más tarde en una temporada: el mismísimo Babe Ruth en 1927, año en el que estableció un récord de 60 jonrones que perduró durante años.
Suárez está emulando a una leyenda, un hecho que no pasa desapercibido para los fanáticos del beisbol. Su poderío en el plato, su capacidad para conectar batazos largos y su instinto para producir carreras en momentos clave lo han convertido en una pieza fundamental para los D-Backs.
Pero más allá de los números y las comparaciones históricas, lo que hace especial a la temporada de "Geno" es la consistencia con la que está produciendo. No se trata de un breve estallido de poder, sino de un desempeño sostenido a lo largo de varias semanas. Esta regularidad es lo que lo diferencia de muchos otros bateadores y lo coloca en la conversación de los mejores jugadores de la liga.
En la campaña del 2024, "Bolibomba" registra un AVG de .256 con 130 indiscutibles, 28 cuadrangulares, 92 carreras remolcadas, 84 anotadas, 47 boletos negociados y 151 ponches sufridos en 508 oportunidades con el madero.