Es posible que los Rangers de Texas contaron con un amuleto de la suerte tras conquistar su primer anillo de Serie Mundial de la historia en las Grandes Ligas.
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Los Vigilantes vencieron a los Cascabeles de Arizona en el Juego 5 (5-0) del Clásico de Otoño y se proclamaron campeones de la MLB, siendo la primera vez para la franquicia desde que fue fundado en 1972.
Con este título, el relevista Will Smith mantuvo su racha en Serie Mundial y se coronó por tercera vez de forma consecutiva, ganando las ediciones anteriores con los Bravos de Atlanta (2021) y Astros de Houston (2022). Con su tercer anillo en fila, el lanzador se convirtió en el primer jugador de la historia en titularse con tres equipos diferentes en tres años al hilo.
Pese a que no fue el cerrador estelar como lo hizo con Atlanta, el veterano colaboró en el éxito del equipo en la postemporada dejando números de cuatro ponches propinados, WHIP 1.80, efectividad de 10.80 y 3.1 innings de labor en cinco presentaciones.
Smith vio acción en la Serie Mundial en el primero y cuarto juego donde trabajó por espacio de una entrada y un tercio con dos abanicados, un boleto, un hit y par de carreras permitidas.
