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En los últimos años, las Grandes Ligas han sido testigos de un resurgimiento del robo de bases. Una estrategia que, durante un tiempo, pareció relegada a un segundo plano, ha vuelto a cobrar protagonismo gracias a un grupo de jugadores cada vez más veloces y audaces. En este contexto, la Liga Nacional se ha destacado como la gran dominadora en lo que respecta a esta fundamental habilidad del beisbol.
Las temporadas 2022, 2023 y 2024 han dejado en evidencia la superioridad de la Liga Nacional en cuanto a bases robadas. Los equipos de esta liga han demostrado una mayor agresividad en las bases, poniendo en aprietos a las defensas rivales y generando oportunidades de anotar carreras.
Esta tendencia se ha visto reflejada en las estadísticas individuales, donde los jugadores de la Liga Nacional han ocupado los primeros puestos en la clasificación de robos de bases.
Un claro ejemplo de esta dominancia fue el año 2024, donde la Nacional contó con tres jugadores que superaron la barrera de las 50 bases robadas: Elly De La Cruz, con un impresionante total de 67, seguido de Shohei Ohtani con 59 y Brice Turang con 50. Estas cifras son una muestra del talento y la velocidad que caracteriza a los jugadores de esos conjuntos en la actualidad.
¿A qué se debe esta superioridad de la Liga Nacional? Las estrategias implementadas por los equipos, que han priorizado el robo de bases como una herramienta ofensiva. Además, las nuevas reglas implementadas en las Grandes Ligas, que han favorecido un juego más dinámico y ofensivo, también han contribuido a este aumento en el número de bases robadas.