En la jornada de este sábado del mejor beisbol del mundo volvió a estar en el foco el criollo Ildemaro Vargas, no obstante, esta vez no fue por un jonrón, sino por una jugada donde aplicó un poco de malicia, para embasarse.
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El bateador ambidiestro se caracteriza principalmente por su contacto y buena velocidad en las almohadillas, algo que exhibió esta noche en el segundo capítulo del duelo entre los Nacionales de Washington contra los Atléticos de Oakland,
Parado a la zurda, Vargas bateó un rodado fuerte que se "metió" en el guante del abridor Luis Medina y parecía un out sencillo en la inicial, pero el pitcher se confío y quiso tocar el mismo la primera, sin percatarse que el venezolano había acelerado su spring leyendo su intención con mucha astucia, para colarse antes que el lanzador tocará la base o se la diera a su compañero y de esa manera llegar a salvo, apuntando un sencillo dentro del cuadro.
La importancia de esta base alcanzada por la inteligencia e intensidad del pelotero nativo del país, se evidenció rápidamente, debido a que en ese mismo segundo episodio anotó la primera carrera de su equipo, tras un sencillo de Blake Rutherford. Dejar todo en el terreno es algo que no hacen todos los jugadores y es un aspecto que los managers aprecian, por eso Ildemaro sigue jugando constantemente con esta franquicia.