Luisangel Acuña está encendido con el madero en la primera mitad de las Grandes Ligas. El segunda base se ha convertido en un dolor de cabeza agradable para Carlos Mendoza y los Mets de Nueva York, que esperan el regreso de Jeff McNeil.
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Con la presencia de Francisco Lindor como campocorto, el infielder ha disputado la mayoría de los partidos como camarero y ha ganado la confianza a punta de batazo. El intermedista viene de una jornada productiva tras ligar de 4-2 con una anotada en la victoria de los metropolitanos (7-4) sobre los Cardenales de San Luis, en la cartelera de este domingo 20 de abril.
Con la pronto llegada de McNeil al equipo grande, Acuña sabe que está entre los elegidos a ceder su espacio en Las Mayores. Pese a un flojo comienzo de temporada, el criollo está haciendo méritos para quedarse en la novena y ser figura para la franquicia de la Gran Manzana.
Luisangel Acuña explota con el madero
Los Mets han ganado siete en los últimos 10 compromisos y el menor de los Acuña tiene su huella en el gran momento de los neoyorquinos. El segunda base luce un promedio al bate de .393 (28-11), cuatro dobles, una remolcada, ocho anotaciones, cinco bases robadas, .452 en porcentaje de embasado (OBP) y un OPS de .987 en el mencionado lapso.
Su destacada aparición al bate en los juegos más reciente ha provocado un ascenso notable en sus numeritos en la actual campaña de MLB. El utility presenta average de .289, 13 hits, 10 anotadas, una impulsada, seis estafadas, .360 de OBP y .760 en 45 veces al plato.
Junto a Brett Baty, el venezolano se está jugando su puesto de mantenerse en el equipo grande de Nueva York en la presente temporada de las Grandes Ligas.