Para que la MLB apruebe la realización de juegos en estadios fuera de los Estados Unidos, los recintos en cuestión deben cumplir con una serie de parámetros necesarios. Se trata de un control de calidad por parte de la mejor liga del mundo de beisbol para mantener los estándares al nivel más alto posible.
En la presente zafra, se han disputado series en Seúl, Ciudad de México y Londres. Igualmente, en los entrenamientos primaverales, la República Dominicana también albergó un par de compromisos entre Rays y Medias Rojas.
David Ortiz juzga la forma en la que está "evolucionando" el beisbol en Dominicana
Si hay un país de donde se exportan más peloteros hacia Las Mayores es la República Dominicana. Es la nación que, quitando a Estados Unidos, aporta más talento al torneo de pelota norteamericano.
Aun así, y teniendo a una de las mejores ligas invernales del Caribe (LIDOM), la isla de Quisqueya todavía no cuenta con un campo aprobado por las normativas de calidad de la MLB.
"Estamos perdiendo un dineral por no tener un estadio capacitado y aprobado por la MLB", dijo el miembro del Salón de la Fama David Ortiz en El Nuevo Diario Podcast. "Entiendo que ya es tiempo que el gobierno haga algo especial en torno a eso. No es por mí, porque yo no soy pelotero ya, es porque a la juventud hay que motivarla".
Uno de los mejores y más famosas instalaciones deportivas en la República Dominicana es el Estadio Quisqueya Juan Marichal, casa de los Tigres del Licey y Leones del Escogido. Son casi 15.000 fanáticos los que pueden ser albergados en él, sin embargo, su antigüedad hace que la Gran Carpa no lo apruebe como un estadio que cumple con las ordenanzas.
"El Quisqueya es un estadio que tiene 1.500 años de hecho. Y en Estados Unidos, MLB ha destruido estadios que no son ni la mitad de viejos del Quisqueya. ¿Por qué? Porque cada estadio en el que se juega un juego de MLB tiene que calificar con las demandas de MLB", enfatizó "el Big Papi".
Asimismo, subrayó que hacer una inversión para la construcción de un estadio de primer nivel no solo beneficiaría a los peloteros, sino también al gobierno, a la economía y, por ende, al pueblo dominicano. Explicó que a través de dichas obras, se notaría inmediatamente un "crecimiento de la empleomanía" y un claro resultado positivo en la población.