Frederlin Castro
Contra sus ex compañeros de equipo, en su antigua casa, con uno de sus héroes de la infancia, Johan Santana, mirando, Pablo López dio un espectáculo que valió la pena el precio de la entrada.
Durante siete entradas el miércoles, López puso en aprietos a sus viejos amigos, coronando su segunda salida de la temporada con un trío de ponches. Por sus esfuerzos, tomó una no-decisión como los Mellizos cayeron 5-2 en la final de la serie a los Marlins de Miami el miércoles por la tarde en loanDepot Park gracias en gran parte a dos jonrones de Marlins bateador designado Jorge Soler.
López mantuvo tranquilos a los bateadores de los Twins, ponchando a 10 en sus siete entradas para los Marlins. En ese encuentro, el venezolano consiguió el ponche 500 de su carrera.
Apoyándose en gran medida en su slider y la recta de cuatro costuras, que promedió alrededor de 96 millas por hora y menos en su característico cambio, López trabajó a través de la alineación de los Marlins con pocos problemas.
Dos veces cuando permitió corredores de base, los sacó rápidamente tratando de robar segunda. La primera vez fue justo antes de que permitiera un jonrón a Soler, la diferencia entre un déficit de una y dos carreras en ese momento. Sólo otro corredor alcanzó la segunda base mientras él estaba en el montículo. López acumuló 15 swings fallos en su salida, incluyendo nueve con la slider.