Frederlin Castro | @fr3djcd
Podría decirse que el área en la que esta versión de los Braves puede recuperar más terreno respecto al equipo del año pasado tiene que ver con la salud de dos piedras angulares de la franquicia.
El jardinero estrella de los Bravos, Ronald Acuña Jr., estuvo limitado a sólo 82 partidos la temporada pasada, tras romperse el ligamento cruzado anterior el 10 de julio. Antes de la lesión, estaba en medio de lo que habría sido hasta ahora el mejor año de su carrera en MLB. En 360 viajes al plato, había bateado .283/.394/.596 con 24 jonrones y 17 bases robadas. Para comparar, en 82 juegos en 2019, cuando casi registró una temporada de 40-40, había bateado .286/.370/.499 con 19 jonrones y 12 robos. No se sabe qué habría hecho Acuña el resto del camino, pero estaba por encima de su ritmo de 2019.
La esperanza es que la lesión de Acuña no tenga un efecto significativo sobre él en el futuro. Si eso resulta ser el caso, los Bravos habrán añadido esencialmente un jardinero de calibre MVP de vuelta a su alineación, lo que les permitirá reducir los roles desempeñados por Duvall, Rosario o Dickerson. Es una situación en la que todos ganan, ya que también mejoraría la calidad del banquillo de Atlanta.
Un brazo de gran ayuda
Un Soroka sano y salvo podría tener un efecto similar en la rotación y el bullpen de los Bravos. Sin embargo, es un comodín más grande que Acuña, ya que no ha lanzado en temporada regular desde que se desgarró el tendón de Aquiles en agosto de 2020.
Soroka había hecho 37 inicios en las grandes ligas antes de eso, acumulando una efectividad de 2.86 y una proporción de 3.11 ponches por boleto. Una vez más, es una incógnita lo que aportará cuando pueda volver a la rotación; si está en el entorno de sus antiguos niveles de rendimiento, los Bravos habrán añadido un titular muy por encima de la media a la mezcla, lo que les permitirá cambiar su titular más débil.
No tiene sentido poner demasiada presión sobre Acuña y Soroka mientras siguen rehabilitándose y recuperándose, pero hay una clara posibilidad de que terminen siendo los que marquen la diferencia en la temporada de Atlanta.