Frederlin Castro │ @fr3djcd
El anuncio de la contratación de Javier Báez con los Tigres de Detroit tomó a muchos por sorpresa en la MLB.
El campocorto puertorriqueño firmó antes del lockout de las Grandes Ligas un contrato por seis temporadas y 140 millones de dólares y ahora será compañero del astro venezolano Miguel Cabrera.
Al debate sobre si su llegada será la clave para que Detroit vuelva a ser un equipo competitivo se ha unido otra discusión.
Por ahora no hay nada claro, ni siquiera los periodistas nos atrevemos a decir cuál debe ser el orden que ocuparán Báez y Cabrera en la alineación del mánager AJ Hinch.
Aunque en principio se cree que Jonathan Schoop será el segundo, Báez el tercero y Cabrera el cuarto, los números de por vida de las dos estrellas latinas sugieren que puede haber un cambio.
En sus ocho años en las mayores, Báez tiene una línea ofensiva de .265 / .306 / .471, 19 jonrones y 60 carreras impulsadas, ocupando el tercer lugar en el orden de bateo. Esos números mejoran a .275 / .319 / .537, 41 jonrones y 115 carreras impulsadas cuando batea en el cuarto lugar.
Por su parte, Cabrera, que jugará su vigésima temporada en las mayores, tiene promedios de .307 / .386 / .528, 282 jonrones y 985 carreras impulsadas cuando batea de tercero y de .320 / .396 / .548, 187 jonrones y 673 carreras impulsadas como cuarto bate.
Lo cierto es que tener al puertorriqueño en la alineación puede ayudar a Cabrera a ver mejores lanzamientos y eso le dará una nueva cara a la producción ofensiva de Detroit.