Gonzalo Urgelles R. | [email protected]
Para muchos, J.T. Realmuto –receptor de los Filis de Filadelfia– es considerado el mejor careta de
las Grandes Ligas en la actualidad. No en vano, los cuáqueros le otorgaron un contrato por 115.5
millones de dólares y cinco años.
En 2019, su primer año con el equipo de Filadelfia, Jacob Tyler Realmuto estableció cifras topes en
su carrera, con 25 jonrones y 83 carreras producidas. Además, bateó para un –nada despreciable–
.275 de promedio.
2020, con todo y lo atípica que fue la temporada por el factor COVID-19, el de Oklahoma dejó
buenos números, bateando para .266 con once estacazos de vuelta completa y 32 fletes.
Esto lo hizo merecedor de la confianza del equipo de Pensilvania, cuya alta gerencia decidió
premiarlo con un contrato récord para un receptor. Con esto, Realmuto se convirtió en el catcher
mejor pagado –por temporada– de las Grandes Ligas, con 23.1 millones promediados.
Joe Mauer había pactado, en su momento, por 184 millones divididos en ocho años, lo que
promedia 23 millones por temporada.
Una de las curiosidades de Realmuto en su carrera ha sido su capacidad para conectar batazos de
tres bases; se puede decir que el careta es casi un especialista en el arte de sacudir triples.
En 2015, mientras todavía vestía los colores de los Marlins de Miami, Realmuto conectó siete
batazos de tres esquinas; la mayor cifra en las Grandes Ligas para un cácher con al menos 80
encuentros, desde que Darrell Porter, de los Reales de Kansas City, bateó 10 en 1979.
Asimismo, en 2017 el otrora receptor de los peces conectó cinco triples. En su última temporada
con Miami, y en la primera con los Filis, conectó trío de triples en cada una de ellas.
En total tiene 19 batazos de esta categoría en su carrera. Todavía lejos del líder de todos los
tiempos, Bill Dickey, que conectó 72. El récord de una temporada para un receptor, lo tiene Buck
Ewing, quien bateó 20 triples en 1884 con los Gigantes de Nueva York.