En un emocionante giro para la historia de la WNBA, Serena Williams, una de las deportistas más influyentes y exitosas de todos los tiempos, ha sido anunciada como una de las copropietarias de las Toronto Tempo, la nueva franquicia de la liga que debutará en la temporada 2026. Esta histórica asociación marca el inicio de un nuevo capítulo tanto para la legendaria tenista como para la liga, que continúa expandiendo su presencia a nivel global y apostando por la inclusión, el empoderamiento de la mujer y la diversidad en el deporte.
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Un paso histórico para la WNBA
La incorporación de las Toronto Tempo como nueva franquicia es un hito en la evolución de la WNBA. Desde su creación en 1997, la liga ha sido un referente para el baloncesto femenino, y la inclusión de Serena Williams como copropietaria resalta el creciente interés y la inversión en el deporte femenino a nivel global.
La tenista, que se retiró del tenis profesional en 2022, continúa demostrando su incansable impulso hacia la innovación, el empoderamiento de las mujeres y el avance del deporte en todas sus formas.
En palabras de Serena Williams, "El baloncesto siempre ha sido una de mis grandes pasiones, y me emociona mucho ser parte de la creación de esta nueva franquicia en una ciudad tan vibrante como Toronto. Creo en el poder del deporte para transformar vidas, inspirar a nuevas generaciones de mujeres y fomentar la igualdad. Las Toronto Tempo no solo serán un equipo de baloncesto, sino un símbolo de lo que podemos lograr cuando nos apoyamos mutuamente y nos mantenemos firmes en nuestra misión de cambiar el juego".
Un compromiso con el deporte femenino
Serena Williams, que ha sido un referente de resiliencia, determinación y éxito durante su carrera en el tenis, tiene una larga trayectoria defendiendo los derechos de las mujeres en el deporte.
A lo largo de su carrera, ha luchado no solo por ser la mejor tenista del mundo, sino también por la equidad de género y la visibilidad de las atletas femeninas en todas las disciplinas. Esta nueva incursión en el baloncesto no hace más que consolidar su compromiso con el deporte femenino y la causa de la igualdad.
Williams se une a un grupo diverso de inversores y empresarios comprometidos con el futuro de la WNBA. La participación de figuras de renombre como Serena en la propiedad de equipos no solo aporta visibilidad y prestigio a la liga, sino que también crea una plataforma para que futuras generaciones de mujeres tengan mayores oportunidades en el deporte profesional. Su entrada en el mundo del baloncesto es un ejemplo claro de cómo las mujeres pueden jugar un papel crucial en el liderazgo de las franquicias deportivas.