¿Un sinónimo de éxito y trabajo en equipo? Sin duda alguna, Scottie Pippen es la respuesta a eso. El estadounidense llegó a la NBA y consiguió incluir su nombre con los más grandes al formar una dupla letal junto a Michael Jordan.
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Este 25 de septiembre, el ex jugador cumple 58 años de edad y es buen momento para recordar un poco de su carrera en la mejor liga del mundo.
En la historia del baloncesto, Jordan es considerado por muchos como el mejor jugador de la historia pero, antes de llegar a ser ese jugador dominante y ganador, tuvo momento difíciles en los inicios de su carrera. ¿Quién cambió todo esto? Pippen.
El alero fue seleccionado en la quinta posición del draft de 1987 por los Seattle Supersonics, quienes lo enviarían a los Chicago Bulls a cambio de Olden Polynice y otra selección posterior. La llegada de Pippen al conjunto de Illinois supuso la conformación de una de las mejores duplas de la historia de la NBA, junto con "Air Jordan", que terminó por darle el salto de calidad que necesitaba el equipo para poder avanzar a playoffs y conseguir sus primeras Finales.
Jordan era la lanza y Pippen llegó para ser el escudo de los Bulls, uno de los dúos más letales de la historia del baloncesto a nivel mundial.
Impacto inmediato
La polivalencia del alero de 2,03 metros de altura hizo que Jerry Krause, director de operaciones de los Bulls, pusiera su mirada en él desde sus tiempos en la Universidad de Arkansas Central y buscó que llegara a Chicago. Esta fue una de las mejores decisiones del dirigente para formar un equipo competitivo y que pudiera trascender en postemporada.
Esto no tardó mucho en llegar. En 1991, los Bulls ya eran campeones de la NBA con Pippen como el escolta principal de Jordan. El mejor equipo de la década de los 90 llegó para quedarse y consiguieron los títulos de 1992 y 1993 también, logrando su primer "Three-Peat".
Su segundo tridente de campeonatos seguidos fue desde 1996 a 1998, luego del regreso de Jordan de su retiro, consiguiendo proclamarse como el mejor equipo de la historia con un dominio total sobre la liga.
Un "two-way" player
Pippen tenía grandes capacidades para el ataque, pero también era un gran defensor. Su envergadura y agilidad le permitían defender a pilotos y ala pívots, llegando a ser el encargado de marcar a los mejores anotadores del equipo contrario.
Fue líder en robos de la liga con 2,95 por encuentro en 1995 y es el segundo con más robos en postemporada en la NBA (395). Esto le valió para ser seleccionado ocho veces al mejor quinteto defensivo.
También, el alero estuvo siete veces al Juego de las Estrellas, cinco veces en los mejores quintetos de la NBA (tres en el mejor quinteto y dos en el segundo).
Fue miembro del Team USA considerado como el "Dream Team" que acudió a Barcelona 1992 y obtuvo el oro olímpico en suelo español, repitiendo en Atlanta 1996.
Sin duda alguna, la carrera de un jugador que fue incluido en el Salón de la Fama en el año 2010 y que está en la lista de los mejores 75 jugadores de la historia de la NBA.