Los Ángeles Lakers fácilmente puede considerado como el equipo menos consistente en la presente temporada de la NBA.
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Después de dos victorias consecutivas, el equipo angelino cayó nuevamente en desgracia con par reveses consecutiva ante Houston Rockets y Atlanta Hawks. Pese a los 20 puntos, nueve rebotes y ocho asistencias de LeBron James, el quinteto fracasó de manera abultada 138-122 ante la franquicia de Georgia.
Con la derrota fresco en la jornada de este martes, el máximo anotador histórico de la NBA explotó ante el inestable desempeño que ha tenido el conjunto en lo que va de campaña. Los dirigidos por Darvin Ham se encuentra en la novena posición en la Conferencia Oeste y ha solo medio juego de salir de los puestos de Play-In.
"En cualquier noche podríamos vencer a cualquier equipo de la NBA. Y luego, cualquier noche, nos podrían patear el trasero", declaró el veterano después de sufrir su vigesimoquinta caída en la vigente campaña.
Parte clave de la inconsistencia de los Lakers en la temporada es su bajo rendimiento a la hora de defenderse. La escuadra de Hollywood ha recibido una alarmante cantidad de 130 unidades de sus rivales en seis de los últimos siete encuentros, quedándose con la victoria en tres de ellos.
En el mes de enero, la tropa de Los Ángeles es uno de cuatro equipos que ha permitido el 49% o más de sus contrincantes en aciertos de campo. Además de eso, es la cuarta organización que más triples sufre de sus oponentes en cada 100 intentos y el quinto que menos pérdida le fuerza a sus rivales (13.2 cada 100 posesiones, según Sporting News).
De no controlar sus problemas defensivos en los siguientes duelos, la escuadra púrpura y James podría poner en peligro su participación a la venidera postemporada.