Russell Westbrook habló una vez más desde el tabloncillo y fue protagonista en el clásico de Los Ángeles donde los Lakers se enfrentaron a los Clippers en el Crypto.com Arena. El piloto volvió a medirse ante su ex equipo y tuvo revancha tras quedarse con la victoria 127-116, en la jornada de este martes por la noche.
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Se entiende que hay una motivación extra cada que vez que el base armador se enfrenta al equipo púrpura, ya que en la pasada temporada salió por la puerta de atrás de ese equipo y lo culparon como uno de los responsable de la irregular campaña de la franquicia angelina. En esta oportunidad, el experimentado sobresalió con 16 puntos, seis rebotes y tres asistencias saliendo desde el banquillo.
Como suplente de los que fueron locales en el desafío, Westbrook tuvo una efectividad perfecta de larga distancia al embocar tres triples en el mismo número de intentos, incluido uno desde el perímetro donde se robó todos los reflectores cuando terminaba el primer cuarto del juego.
Poco más de 30 segundos por jugar, el nueve veces All-Star perdió uno de sus zapatos mientras armada un ataque por los Clippers. Pese a ello, el veterano siguió con la posesión y terminó anotando un insólito triple para poner a su equipo a ganar por diferencia de cuatro unidades.
Tras su increíble cesta, el piloto puso de pie a todos sus seguidores y se convirtió en artífice para que su quinteto ganara su octavo partido en los últimos 10 duelos. Con este triunfo, los dirigidos por Tyronn Lue se acercan a la cima del Oeste a solo juego y medio de Oklahoma City Thunder.