Redacción Meridiano
En la temporada pasada se protagonizaron múltiples clavadas que causaron impresión en la liga, desde la temporada regular hasta la postemporada, sin embargo; fueron pocos los escogidos para ser los candidatos a ser el mejor, incluso se estimaba que Ja Morant sería el ganador, pero tras la clavada de Andrew Wiggins sobre Luka Doncic en las finales de Conferencia Oeste, todo dio un giro de 360.
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El alero de los Golden State Warriors firmó una grandiosa temporada, se conviritó en una de las piezas claves del conjunto de la Bahía de San Francisco, que consiguí hacer sentir su nombre, pero tras su grandiosa volcada frente a la estrella eslovena de los Mavs, consiguió mayor prestigio.
La NBA catalogó como el dunker de Wiggins, como el mejor de la temporada pasada, dicha jugada conmocionó a toda la liga, generó miles de reproducciones en las plataformas digitales y los alagos de múltiples jugadores de la liga.
