En un emocionante y disputado encuentro, la selección de baloncesto de Venezuela logró llevarse el triunfo este domingo 23 de febrero ante la selección de Chile, en lo que fue el último duelo de ambas selecciones correspondiente a la quinta ventana clasificatoria a la AmeriCup 2025. El marcador final fue de 73 a 72, con un desenlace que se definió en tiempo extra, reflejando la intensidad y la determinación de ambos equipos.
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La localía, el mejor amigo de Venezuela en las Eliminatorias
Una de las claves del éxito del conjunto criollo, además de su destacado rendimiento en la cancha, fue sin duda la ventaja de la localía. Durante estas eliminatorias, Venezuela se mostró imbatible cuando jugó en su tierra, manteniendo un récord perfecto en los partidos disputados en casa.
En total, solo jugaron tres encuentros en el país, comenzando con el primero en el Domo José María Vargas, ubicado en el Estado La Guaira en 2024 ante Colombia, y continuando con los últimos dos compromisos en el Gimnasio José Joaquín Papá Carrillo, en el Estado Miranda ante Argentina y Chile.
En estos escenarios, Venezuela logró alzarse con la victoria en cada uno de sus partidos, lo que resalta la importancia del apoyo de la afición y el ambiente propicio que se genera al jugar en casa. Sin embargo, fuera de su territorio, la situación fue diferente.
El equipo no pudo obtener un récord positivo, sufriendo tres derrotas consecutivas en sus compromisos internacionales, lo que hizo aún más crucial el desempeño en los juegos como local. El partido contra Chile fue una verdadera prueba de carácter.
Lucharon hasta el final
La selección venezolana mostró su capacidad para luchar hasta el último segundo, logrando superar un marcador adverso y forzando el tiempo extra, donde finalmente se llevaron el triunfo. Este resultado no solo garantiza un lugar en la AmeriCup 2025, sino que también solidifica la confianza del equipo de cara a futuros desafíos.
La experiencia adquirida en estos partidos es fundamental, y cada uno de los encuentros jugados ha contribuido al crecimiento del equipo. Con la clasificación a la AmeriCup 2025 asegurada, Venezuela se prepara para enfrentar a los mejores equipos de la región. El objetivo es claro: no solo competir, sino también dejar huella y demostrar el potencial del baloncesto criollo en el escenario internacional.