Ante la llegada de una ola de calor y las altas temperaturas que se avecinan, es fundamental tomar precauciones para proteger nuestra salud y bienestar. Aquí te presentamos algunos consejos prácticos para enfrentar estos días de altas temperaturas.
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Mantente hidratado: Beber suficiente agua es esencial para mantenernos hidratados en días calurosos. Evita bebidas con alto contenido de azúcar y cafeína, ya que pueden tener un efecto deshidratante. Opta por agua, jugos naturales o infusiones frías para mantener tu cuerpo hidratado.
Busca lugares frescos: Durante las horas más calurosas del día, procura estar en lugares frescos y bien ventilados. Si no tienes aire acondicionado en casa, busca espacios públicos con aire acondicionado.
Viste ropa ligera: Utiliza ropa ligera, holgada y de colores claros que permita la ventilación y la evaporación del sudor. Opta por materiales naturales como el algodón o el lino, que ayudan a mantener la frescura.
Protégete del sol: Si tienes que salir al exterior, utiliza protector solar de amplio espectro, sombrero de ala ancha y gafas de sol para proteger tu piel y ojos de los rayos UV. También evita la exposición directa al sol en las horas pico, que suelen ser entre las 11 a.m. y las 4 p.m.
Evita actividades extenuantes: Durante los días de calor intenso, reduce la intensidad de tus actividades físicas. Si realizas ejercicio al aire libre, elige las primeras horas de la mañana o las últimas de la tarde, cuando las temperaturas son más bajas.
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Refréscate con baños o duchas: Tomar baños o duchas frescas puede ayudar a regular la temperatura corporal y proporcionar alivio durante los días calurosos. También puedes usar paños húmedos o toallas frías en el cuello o el rostro para refrescarte.
Cuida a los grupos más vulnerables: Presta especial atención a niños, personas mayores y aquellas con enfermedades crónicas, ya que son más susceptibles a sufrir golpes de calor. Asegúrate de que estén hidratados y se encuentren en lugares frescos.