Las tormentas en el sur de Estados Unidos han causado estragos devastadores, con al menos tres muertes reportadas. Meteorólogos habían advertido sobre la llegada de condiciones climáticas peligrosas, incluyendo tornados y granizo de gran tamaño. La región ha sido golpeada por una sucesión de lluvias torrenciales y tornados desde principios de semana, con víctimas mortales en Tennessee y Carolina del Norte.
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El Servicio Meteorológico Nacional ha continuado emitiendo alertas por tornado en varios estados del sur, mientras que partes de Arkansas y Mississippi permanecieron bajo aviso de tornados durante la noche. En Tennessee, fuertes vientos derribaron árboles y tendidos eléctricos, causando la muerte de una persona. En Carolina del Norte, un tornado tocó tierra en la ciudad de Columbia, en el condado de Maury, donde otra persona perdió la vida.
Las tormentas también provocaron rescates acuáticos en áreas cercanas a Nashville, donde se suspendieron temporalmente los vuelos en el aeropuerto internacional y se activaron emergencias por tornado en varias zonas. El mal tiempo también causó la declaración de emergencia por inundaciones repentinas en algunas áreas. Michigan, Ohio e Indiana también sufrieron los embates de los tornados, con casas destruidas y personas heridas.
La noticia han impactado a cientos de usuarios de la plataforma social X (antes Twitter), y es que, en tiempo real, se han estado publicando videos de lo que viene siendo esta tormenta que ha estado causando desesperación en cada paso, obteniendo miles de reproducciones y comentarios. En los audiovisuales se logra apreciar parte de lo que la furia de la naturaleza ha sido capaz de hacer, como lo son inundaciones, vientos agresivos y demás.
La gobernadora de Michigan declaró el estado de emergencia en cuatro condados debido a la devastación causada por las tormentas. Las tormentas han dejado un saldo trágico y han causado daños significativos en varias comunidades del sur de Estados Unidos, resaltando la importancia de las advertencias meteorológicas y la preparación para eventos climáticos extremos.