El Caracas FC volvió a tropezar en la liga venezolana y vive una fuerte crisis justo antes de debutar en la Copa Libertadores. El equipo que viene de disputar la final del anterior campeonato ahora deberá tomar decisiones drásticas con la esperanza de salvar lo que queda de temporada y calmar a la fanaticada que pide la salida del actual técnico.
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Todo indicaba a finales de 2023 que el proyecto de Leo González podría consolidarse en 2024 pero ha pasado todo lo contrario. La salida de importantes futbolistas han dejado un vacío que el cuerpo técnico no ha sabido cómo subsanar y ahora mismo no parece haber punto de retorno.
El Caracas Fútbol Club suma ocho partidos consecutivos sin ganar (cuatro empates y cuatro derrotas), una pésima racha que lo coloca en el décimo primer lugar de la clasificación a once puntos del sorprendente Angostura que lidera la tabla con 21 puntos, por solo 10 de los avileños.
La fanaticada de los rojos se hartó de la situación y tras la derrota frente al Inter Barinas en casa 1-2 saltaron a la cancha para exigir la salida de Leo González y pedir cambios que de verdad provoquen una escalada en la dinámica de un equipo que dentro de poco tendrá complicados compromisos por delante.